La falda con tablas no solo le da movimiento y estructura , sino que además te deja espacio para caminar sin parecer que vas haciendo pasitos de geisha. Es un vestido que acompaña, no que te domina.
¿La ventaja? Que te ponés esto y ya estás lista. No necesitás pensar demasiado: vas cómoda, abrigada y con linda. No importa si es para ir a la oficina, una reunión o para hacerte la canchera en el supermercado: el vestido cumple.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.